lunes, 13 de febrero de 2012

Anatomía general de las hormigas (5): Patas.

Bueno, teníamos esta serie de entradas, correspondientes a la anatomía de las hormigas  un poco “huérfana”, así que vamos a darle un empujoncito:


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La coxa (nº1 en la imagen precedente) es el primer segmento que une la pata de una hormiga con el tórax, recordemos que cada segmento del tórax tiene asociado un par de patas. Le sigue el trocánter (2) que articula al fémur (3) con la coxa, Más abajo del fémur está la tibia (4) que alberga la glándula metatibial (5) y los espolones (6) o espuelas tibiales (más o menos evidentes), muchas veces éstos sirven de “cepillos” limpiadores para antenas y del resto de la parte delantera del cuerpo de las hormigas. Finalmente, le siguen cinco tarsos (7), el último con dos uñas o garras (8) que pueden ser dentadas o pectinadas (*), éstas constituyen en algunos géneros de hormigas caracteres diagnósticos.

Y finalmente, la arolia (9): En muchas especies de hormigas puede observarse una callosidad entre las uñas que constituye una suerte de almohadilla adhesiva, ésta sirve para escalar superficies lisas verticales. A este respecto, algunas veces hemos visto fotografías de hormigas “trepando” por un cristal vertical, e incluso, aguantando “boca abajo”, en posición invertida, un peso considerable.


(*): Pectinado: se refiere cuando se está ordenado en un solo sentido. Por ejemplo, un peine tiene orientadas todas sus púas en un solo sentido.