Anoche y con “un poco de ayuda”, la colonia del hormiguero nº 18 (el de Miguel Angel Abellán, de Murcia) de la que ya hablamos en otra entrada anterior (Regalo y recogida de un hormiguero en Murcia.), empezó a mudarse de hormiguero. Primero, las obreras empezaron trasladando a las pupas y luego huevos y larvas, más tarde terminaron llevando parte de sus provisiones. Finalmente la reina hizo acto de presencia en la superficie de la caja rodeada (y empujada) por una corte de soldados y demás obreras que la condujeron rápidamente hacia su nueva morada (en menos de 10 segundos).
Tal y como me comentaron algunos compañeros de La Marabunta, el hormiguero que había destinado inicialmente era pequeño. Pude solucionarlo rápidamente añadiendo una sección más (+ 50% de volumen). Hoy quiero proporcionarles un poco de descanso antes de proceder a su instalación definitiva, colgado en la pared y el añadido de una caja de forrajeo de dimensiones aceptables. Según Miguel Angel, su antiguo dueño, en el hormiguero “podían” coexistir unas 3.000 hormigas, pero creo, a la espera de un conteo en condiciones, que serán bastantes, pero que bastantes más. Aún falta una pequeña ampliación, pero dentro de poco, cuando esté terminado, pondré unas fotos del montaje final.