domingo, 30 de octubre de 2011

Otro vuelo nupcial de Messor barbarus en Zaragoza.

...Y ya van dos que yo sepa. Esta mañana, después de algunos días de mal tiempo, ha amanecido un sol “radiante”. Paseando por Juslibol, un pequeño pueblo “río arriba” muy cercano a la capital de la “Pilarica”, me he topado con un hormiguero de Messor barbarus (Linnaeus, 1767) con multitud de nuevas “bocas”, por donde deambulaban las obreras muy nerviosas y sin alejarse del nido.



Hacia las 10:30h, escoltados por las obreras, han salido los machos que inmediatamente han echado a volar. Más tarde, hacia el medio día, han asomado las hembras aladas. Al principio tímidas (al acercarles la cámara, rápidamente se volvían a esconder en el nido), para poco después salir todas en tropel.



Es impresionante, el ver como estas hembras son capaces de remontar el vuelo, casi en vertical, siendo tan "pesadas". Al cabo de media hora, mientras sacaba fotos a un cercano hormiguero de Pheidole pallidula (Nylander, 1849), me ha caído encima, casi "a plomo" una hembra; mientras terminaba de hacer las fotos, he podido observar como se ha quitado, arrancado mejor dicho, las alas y ha empezado a caminar por el suelo en busca de refugio, he querido seguirla y ha tardado cerca de dos horas en elegir el futuro emplazamiento de su colonia, ha elegido un lugar donde ha podido hacer palanca con sus mandíbulas y cuerpo y, rápidamente ha empezado a cavar un agujero, suficiente para pasar su abultado gaster y esperar hasta la próxima primavera para empezar a poner huevos... ¡Espero que tengas suerte!



Más tarde, han empezado a caer también al suelo los machos de esta especie; exhaustos después del vuelo y de una posible cópula, apenas podían defenderse de la fauna que empezaba a congregarse por estos pagos; algunos pájaros con poca habilidad para atraparlos al vuelo se atracaban a escasos metros de mí, jóvenes lagartijas [Psammodromus algirus (Linneo, 1758)] que aun no han empezado a hibernar han salido de todas partes, al final atrapaban solo a las hembras (más jugosas a causa de su contenido ovígero). También arácnidos e insectos varios (chinches), e incluso otras especies de hormigas, como Aphaenogaster sp. de las que por cierto no había observado aún, en plena naturaleza (pero sí en cautividad), colaborar 2 y 3 ejemplares en la reducción y transporte al nido de un macho moribundo de Messor barbarus.



Y bueno, al llegar a casa, me he dedicado a filtrar, almacenar, duplicar y documentar las fotos y videos que he captado esta mañana; he enviado a algunos colegas de Inglaterra, Holanda y Alemania algunas imágenes (pobrecillos, ellos no tienen esta especie en su tierra :-( recibiendo rápida respuesta de todos ellos… ¡Más por favor!